03/10/2022
La Terapia Sistémica se conoce desde 1930 dentro del ámbito de la terapia familiar.
Hoy día, es todavía una orientación de la psicología algo desconocida para algunos, pero, es en los últimos años que va adquiriendo más auge. Desde este enfoque, se permite de igual forma, el abordaje individual, aunque se utilice prioritariamente en la terapia familiar.
Se trata de una perspectiva integradora, donde lo importante no es la persona individual, sino que ésta es mirada a través de sus relaciones y los componentes que a partir de ellas emergen.
La terapia sistémica, pone especial importancia en la relación y comunicación. La psicoterapia individual des del Pensamiento Sistémico, incluye no sólo el abordaje del malestar de la persona, sino también la exploración de las relaciones significativas con su entorno, ya que es a través de estas relaciones que la persona va configurando la realidad sobre sí mismo, los demás y el entorno.
Observa los fenómenos de manera circular y multicausal, y no lineal (causa/efecto); los problemas se entienden por cómo el comportamiento de una persona influencia las acciones de otro y viceversa. Se entiende al individuo como un ser proactivo que influye en su entorno a través de sus actos y en sí mismo, y a la vez, es influido por dicho entorno en una espiral de interacciones. La persona, acaba actuando en función de las interacciones con lo que le rodea. La Sistémica busca identificar y diagnosticar cuáles son las relaciones significativas para comprender la conducta individual.
La metodología sistémica no busca comprender el porqué de una actitud, sino que intenta solucionar los problemas a los cuales se enfrenta una persona.
La Terapia sistémica es una rama de la psicología que no trata al individuo de forma aislada, ya que considera que nuestra manera de ser depende de lo que aprendemos en los diferentes sistemas en los que nos interactuamos y cómo nos comunicamos con éstos y con nosotros mismos y de ahí identificar qué dificultades, problemas o malestar se producen y resolver para obtener un mayor bienestar.
Desde este enfoque, se intenta comprender las experiencias individuales entendiendo cuáles son los patrones o roles que hemos adoptado dentro de nuestras relaciones y cómo solucionándolos o cambiándolos podemos acabar con nuestros problemas personales.
Entendiendo que la realidad se construye a través del lenguaje en las interacciones mencionadas.
Desde el enfoque sistémico se intenta:
Por tanto, el objetivo es desarrollar herramientas que ayuden a afrontar los cambios individuales necesarios para llegar al equilibrio y al bienestar psíquico deseado facilitando la comprensión de uno mismo y de los demás.
*Foto Pixabay